Todos los Jueves, con material renovado.

CINETICO dejará de salir por un tiempo...

... que depende del tiempo que me demandará recuperarme de la operación. Por favor, disculpen las molestias.



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jueves, 13 de agosto de 2009

Gran vida y gran obra de John Hughes

Contrariamente a lo que se cree, el cineasta denominado “de culto” no está relacionado con el género fantástico.

En su época, John Hughes fue menospreciado por la crítica especializada como por muchos de sus pares que no lo tenían en cuenta en las ceremonias de premiación, quizás por haber tenido mucho éxito como por pensar en otros veedores para sus historias, pero la huella que dejó en la historia del cine es muy recordada por quienes crecieron viendo sus films.

Empezó como publicista y guionista de comediantes como Rip Taylor y Rodney Dangerfield hasta que se convirtió en editor de la revista humorística National Lampoon, en 1979.

Trabajar en dicha publicación, lo insertó en el mundo de la televisión cuando fue uno de los libretistas de Delta House (1979), una serie inspirada en Colegio de animales (National Lampoon`s Animal House, 1978). Aunque los capítulos fueron pocos, nada impidió que tres años más tarde escriba para la pantalla grande National Lampoon`s class reunión (1982) y luego Señor Mamá (Mr. Mom, 1983), con Michael Keaton.

Con estos largometrajes él iniciaba la década donde Hughes sería unos de sus iconos, como la conservadora presidencia de Ronald Reagan y el regreso de la películas familiares que surgieron por el éxito de E. T., el extraterrestre (E. T., the extraterrestrial, 1982).

Sa primera gran venta de entradas la tuvo con una que escribió, Vacaciones (National Lampoon`s Vacations, 1983), clásico de la comedia norteamericana protagonizado por Chevy Chase que dió pie a tres secuelas. Y al año siguiente, se inicia como director con Se busca novio (Sixteen candles, 1984), la comedia que lanzó al estrellato a la pelirroja de labios carnosos Molly Ringwald, para luego hacer una de sus obras maestras y la que más se recuerda, El club de los cinco (The breakfast`s club, 1984).

La comedia dramática sobre jóvenes, cada uno era un estereotipo norteamericano, que debían pasar varias horas encerrados en un colegio como castigo por algo que hicieron, impactó muchísimo en una audiencia que compartía la misma edad y los mismos problemas que los protagonistas. Una popularidad que se acrecentó con su salida en video, modo de ver cine en casa que hacía su explosión mundial en aquél entonces.

Hughes generó un publicó que iba a ver sus films por el solo hecho de tener su nombre, como Ciencia loca (Weird science, 1985), la de los chicos impopulares que diseñan la chica soñada; Experto en diversión (Ferris Bueller `s day off, 1986), a mi criterio su mejor película y La chica de rosa (Pretty in pink, 1985), que solo escribió.

Muchos de los actores que él dio a conocer fueron parte de una generación que fue denominado como “The Brat Pack” (Banda de mocosos), término paródico al dado al clan Sinatra, The Rat Pack. Pero también escribió historias sobre gente grande, como Mejor solo que mal acompañado (Trains, plains and automóviles, 1987), con Steve Martin y John Candy, que suele entrar en listados de mejores películas navideñas de Estados Unidos, y Tío Buck (Uncle buck, 1989), con Candy otra vez. En la película de este comediante recordado, hace su aparición un pequeño de cabello como repercusión de oro. A este niño, con el nombre raro de Macaulay, lo dejaría solo en una casa por error, en vísperas de Navidad y al acecho de dos ladrones.

Mi pobre angelito (Home alone, 1990), que él escribió y produjo inspirándose quizás en su Ferris Bueller (si ven las dos películas notarán que en algún momento ambos personajes levantan las cejas mirando a cámara). Mi pobre… se convirtió en una de las films más taquilleros de la historia munidal para sorpresa de muchos. Pudo haberla dirigido, en lugar del ignoto Chris Columbus, pero prefirió impartir órdenes a cámaras y reparto en Mi pequeña pícara (Curly Sue, 1991), su última dirección, y que, si bien ocurre en navidad como muchas de sus mejores historias, no le fue bien en taquilla.

Podría pensarse que luego de unos años ochenta donde pensaba en adolescentes para sus personajes, haría de los noventa historias sobre grandes, pero, por el contrario, dedicó su tiempo a comedias más bien para infantes como Daniel, el travieso (Dennis the menace, 1992), Beethoven (Beethoven, 1992), ¡Cuidado! Bebe Suelto (Baby`s day out, 1994) y las nuevas versiones de Milagro en la calle 34 (Miracle on 34th Street, 1994), 101 Dálmatas (101 Dalmatians, 1996) y Flubber (Flubber, 1997).

El jueves se notificó sobre su deceso a causa de un ataque al corazón. Tenía 59 años.


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